El Senecio coral, que responde al nombre científico de Senecio fulgens, o  Kleinia fulgens como sinónimo, es una planta suculenta rizomatosa, originaria del sur de África, que forma parte de la familia Asteraceae y ronda los sesenta centímetros de altura. Dentro de su hábitat natural se la encuentra creciendo en acantilados y en las grietas de las rocas.

Da una hermosa floración, de color rojo intenso, que se destaca dentro de los jardines en el invierno, contrastando con el gris-verdoso de sus gruesas hojas. Sus pequeñas flores se reúnen en inflorescencias de tipo capítulo, entre treinta y sesenta de ellas, sostenidas por largos pedúnculos; son polinizadas por algunas especies de mariposas y otros insectos.

Se lo emplea para conformar rocallas junto con otras especies, o bien solo en un lugar preponderante dentro del entorno. Sus carnosas hojas, ovales, con  márgenes enteros y un prominente vértice triangular acuminado, se disponen de manera espiralada o formando una roseta en la cima de los tallos de alrededor de un centímetro de diámetro; muchas veces éstos se ven cubiertos de cicatrices debido a las hojas que se desprendieron.

Es muy sencillo de propagar, mediante semillas y esquejes de hojas y tallos. Las semillas se siembran frescas y a escasa profundidad en contendores con buen drenaje, con una mezcla a partes iguales de tierra, arena y corteza; humedeciendo apenas la superficie. Para obtener esquejes de tallos utilizar un cuchillo bien afilado, dejarlos secar durante algunos días y luego introducirlos en un recipiente con arena, se los trasplanta cuando ya cuentan con varias raíces; con las hojas proceder de igual forma. Entre un mes y medio y dos meses tendremos una nueva planta ya consolidada.