La Berenjena, o Solanum melongena, es una planta herbácea anual de la familia Solanaceae, originaria de la India. Su tallo es fuerte (tiene tejidos lignificados que le dan apariencia arbustiva), pubescente, rígido y ramificado. No sobrepasa los 80 cm de alto. Tiene hojas grandes, verdes, alternas, enteras, con pequeñas espinas en las nervaduras, bordes festoneados y largos pecíolos. Sus flores nacen en ramilletes de tres o cinco pero sólo una es hermafrodita y fructificará bien, es la que está unida por un pedúnculo fuerte al tallo, las demás darán frutos demasiado pequeños o se secarán (por lo general es autógama aunque eventualmente se puede producir el cruzamiento con otras plantas cercanas); tienen forma estrellada y color violáceo, el cáliz persiste aún después de la fecundación.

El fruto es una baya de gran volumen, carnosa, de forma alargada y globosa, de más de diez centímetros de largo, con piel lisa y brillante; su color puede variar, los hay  blanco-verdosos y  violetas en toda la gama de su tonalidad; en el interior contiene semillas amarillentas, deprimidas en forma de riñón, se necesitan entre 250 y 300 para formar un gramo de tan livianas y pequeñas que son.

Requiere de climas entre moderados y cálidos (temperatura mínima 10 ºC y máxima 45 ºC), necesita muchas horas diarias de luz; sobre suelos prefiere los arenosos, aunque en realidad no es muy exigente pues acepta terrenos marcadamente arcillosos algunas veces. Las variedades tempranas se siembran en almácigos en invernadero y se las va trasplantando cuando alcanzan los 15 cm de alto y ya pasó el peligro de las heladas, dejando unos 50 cm entre una y otra. Las variedades tardías se siembran en primavera en almácigos al aire libre y luego se procede igual que con las anteriores. Se le proporcionan riegos frecuentes, sobre todo al comenzar a formarse el fruto porque de escasearle el agua no se desarrolla.

La primera poda será un despunte para que dé frutos más grandes y eliminaremos más adelante las ramas que no los tengan, asimismo después los frutos que se noten con alguna falla. Para la recolección hay que cortarlos con cuidado por el pedúnculo para no dañar la planta y que esta prosiga con la maduración del resto de los frutos a los que aún les falte. No soportan más de dos días de almacenamiento.

Para obtener semillas se marcan las plantas que se observen con mejor producción y se dejan los frutos en ellas hasta que alcancen su madurez completa, luego cuando comienzan a perder el color se sacan y se los pone a secar al sol, pronto dan síntomas de descomposición y es entonces que se extraen la simiente. Se las lava y se las deja secar al sol, su poder germinativo se mantiene por unos cinco años. Entre las variedades más cultivadas podemos mencionar: La “Black Beauty” (recomendada para huertas familiares) que es muy vigorosa, con frutos  ovales y grandes  de color púrpura oscuro brillante; la “Violeta medio larga” cultivada en huertas comerciales, con frutos alargados más gruesos en el extremo inferior que en el punto de unión con el pedúnculo; y la comúnmente llamada “Monstruosa de Nueva York”, una variedad tardía con frutos grandes y redondeados.

En cuanto a fertilizantes debemos aplicar diluidos en el agua de riego nitrógeno (para que se desarrolle bien), fósforo (que fortalece las raíces), magnesio (que evita el amarilleamiento foliar) y potasio (que ayuda a la maduración de los frutos y a prevenir enfermedades). Entre las plagas que la afectan cabe mencionar al “Escarabajo de la patata”, a los Nematodos, a la Arañuela roja y al Oidio. Luego de la poda conviene realizar un tratamiento antibotrytis.

Se usan en numerosas recetas de cocina, pero por sobre todo se recomiendan en dietas porque producen sensación de saciedad y brindan poco aporte calórico, su composición es un 92% agua. La berenjena  una vez cortada por la mitad tiende a oxidarse por el contacto con el aire y su pulpa se oscurece, para quitarles el sabor amargo se las deja cubiertas con sal por y luego se las lava bien. La mejor manera de conservarlas es en escabeche. El plato a base de berenjenas más conocido mundialmente es el Ratatouille, aunque lleva además otras hortalizas.