La Casuarina equisetifolia, Casuarina o “Pino australiano” es un árbol siempreverde de gran porte (más de cuarenta metros de alto) y rápido crecimiento, perteneciente a la familia Casuarinaceae. Su corteza es de color gris amarronado, muy áspera y con arrugas. Es originario de las zonas tropicales australianas y el sudeste asiático, donde prácticamente las heladas no existen, en caso de ubicarlos en regiones donde sí las haya el daño es mínimo si ya los ejemplares están fuertes, mientras que en los ejemplares jóvenes de medio metro o menos pueden llegar a morir en caso de fríos extremos. Es empleado para reforestar, su madera (que es dura y pesada) sirve como leña, su pulpa para fabricación de papel, sus largos troncos proporcionan buenos postes y, además, es rico en tanino. El género Casuarina lo forman unas 50 especies de los más variados tamaños, algunos de las más difundidas son la Casuarina cunninghamiana, la Casuarina glauca y la Casuarina cristata.
En su hábitat natural se lo encuentra en suelos arenosos de salinidad moderada (llanos costeros), en suelos arcillo-limosos (valles ribereños) o sobre piedra caliza con base volcánica, por lo que podemos afirmar que necesita suelos porosos con el adecuado drenaje (el empantanamiento no es beneficioso), con napas subterráneas de 1 a 4 metros de profundidad y el pH que tolera es muy amplio, abarcando desde 5.0 a 9.5. Si se observa coloración rojiza en las ramas finas es debido a que están necesitando fósforo, su carencia inhibe la fijación del nitrógeno que realizan sus simbiontes (actinomicetos Frankia) radiculares y la planta se ve perjudicada; si lo que le falta es potasio puede hasta producirse el secado total del árbol.
Casi siempre se lo halla asociado a una vegetación baja de gramíneas y hierbas (si bien la hojarasca de casuarina es de descomposición lenta y puede aportar toxicidad a la tierra, impidiendo que otros vegetales se desarrollen), también con sotobosques, o los podemos ver dispersos en bosque abiertos. Tiene una raíz pivotante profunda y un sistema secundario, formado por raicillas extendidas lateralmente, muy cercano a la superficie. Se lo confunde con una conífera por el follaje aciculado, pero el mismo no es tal sino ramillas de entre 1 y 2 mm de circunferencia y unos 15 o 20 cm de largo que se modificaron para cumplir la función de fotosíntesis, las hojas verdaderas son minúsculas y se disponen sobre las ramillas a modo de escamas y sólo se pueden distinguir mediante lente de aumento.
Comienza a dar flores entre los dos y los cinco años, las más comunes son las especies monoicas con flores femeninas y masculinas en la misma planta pero hay también variedades dioicas, con ejemplares que dan sólo flores femeninas (constituidas por un pistilo, un ovario, un estilo y dos estigmas largos de color rojo muy oscuro) reunidas en una inflorescencia tipo espiga; y ejemplares que sólo poseen flores masculinas (que constan de un estambre y de sépalos marrón oscuro), éstas últimas se reúnen en inflorescencias de tipo amento que tienen forma cilíndrica y miden apenas dos centímetros de largo por medio centímetro de ancho. La polinización es anemófila, es el viento quien transporta el polen.
Lo que conocemos como fruto es en realidad una infrutescencia de consistencia leñosa, mide entre 1,5 y 2 cm. de diámetro y está formado por varias frutas de unos 3 x 3 mm. Antes de madurar son de un gris verdoso, luego cambian a marrón rojizo, entonces las bractéolas individuales se abren liberando cada par una semilla alada (sámara) que es dispersada por el viento. Las que mejor germinan son las recolectadas de árboles de unos cinco años más o menos (que es cuando son más vigorosos) y tardan entre una y tres semanas en asomar de la tierra, la cual debe ser fina, franco-arenosa o bien mezcla de musgo de pantano y arena. Su poder germinativo dura alrededor de tres meses, conservadas en frío pueden llegar a los dos años.
Las plántulas se pasan de los almácigos a pleno sol a contenedores cuando alcanzan los 15 cm más o menos, esto da mejores resultados en cuanto a la calidad de los arbolitos que cuando son plantados directamente en el lugar definitivo. Cuando están cercanas al medio metro de alto se las trasplanta al terreno. Tiene un máximo de vida de 50 años. Algunas de las plagas más frecuentes son el Minador de tallos y ramillas y la Hormiga defoliadora.
