Manilkara zapota es el nombre científico del árbol del que se extrae el polímero gomoso conocido como “chicle” o “goma de mascar”, pertenenece a la familia Sapotaceae y es originario de América, de sus bosques tropicales. Se halla entre el nivel del mar y los mil doscientos metros de altitud, en zonas de temperatura media aproximada a los 26º y con precipitaciones de entre 800 y 2500 milímetros. La madera es dura y resistente, se la emplea para realizar tallas y esculturas, muebles, pisos, quillas de embarcaciones, etc.
La savia aromática y de sabor dulce es extraída mediante un proceso similar al que se emplea con el árbol Hevea Brasiliensis para obtener el caucho, efectuándosele incisiones al tronco para que mane. La producción comienza ya muy avanzada la edad de la planta y hay que dejar pasar algunos años entre extracción y extracción por lo que no resulta muy económico y se ha ido reemplazando el producto natural por otros obtenidos artificialmente. El fruto, que es una baya comestible, tiene pulpa muy dulce, se lo conoce como “chicozapote”, se cosecha directamente del suelo o usando varillas con ganchos metálicos en la punta, un sólo ejemplar adulto produce más de dos mil frutos al año; la ingesta aporta a nuestra dieta azúcar, calcio, hierro y fósforo.
Esta planta perennifolia alcanza con facilidad los treinta metros de altura y un metro y medio de diámetro, tiene copa densa y de forma redondeada, el follaje presenta aspecto coriáceo. La corteza externa es oscura y agrietada, la interna entre rosada y rojiza, merced a los taninos que contiene se la emplea para encurtir cueros, se le atribuyen propiedades febrífugas además. Posee hojas simples, elípticas y con el margen entero; son glabras y de un color verde intenso que se aclara en el revés, se ubican en las ramas de forma espiralada; dentro de la medicina no tradicional se les reconoce un fuerte poder astringente y en decocción se las ingiere para aliviar los síntomas de la gripe y disminuir la presión arterial. La infusión hecha con las semillas (hay alrededor de una docena en cada fruto) se utiliza a modo de sedante.
Se reproduce mediante semillas (la infusión hecha con ellas se utiliza a modo de sedante), éstas conservan la viabilidad durante siete meses, germinan entre los quince y los cuarenta días posteriores a la siembra; también se emplea el método de estacas y los acodos aéreos. Se adapta a diversos tipos de suelo pero prefiere los profundos con abundante cantidad de materia orgánica y buen drenaje. Necesita mucho sol y podas de forma. Las flores hermafroditas, blancas y de dulce aroma, con forma acampanada, son muy útiles para la producción melífera, se reúnen en grupos de tres o de cinco.
