Recibe el nombre científico de Penstemon digitalis una planta perenne y de consistencia herbácea, miembro de la familia Scrophulariaceae (Plantaginaceae según otra clasificación), originaria de América del Norte, más específicamente de la cuenca del Río Mississippi, donde adornan las praderas.

La parte aérea suele medir alrededor de noventa centímetros de alto. Las hojas basales son de forma oblonga a elíptica y las superiores lanceoladas. Florece en primavera. Sus tallos son rectos y sostienen en el ápice un racimo con numerosas flores conspicuas, axilares, blancas y pedunculadas, que nacen de a pares; las mismas tienen una base tubular que se abre luego en cinco pétalos desiguales que presentan líneas rojas discontinuas de manera muy dispar; miden unos tres centímetros y medio de largo por otro tanto de diámetro. El aparato reproductor masculino lo conforman cinco estambres de los cuales uno es estéril. La polinización es llevada a cabo por los colibríes y abejorros que las visitan atraídos por el néctar que producen.

Las varas pueden utilizarse como flor de corte para colocar en jarrones y engalanar el interior de las viviendas. Actualmente se la está empleando mucho en los jardines como especie ornamental, para ello cabe recordar que precisa ubicaciones en las que disponga desde sombra parcial a sol pleno; suelos fértiles, con buen drenaje y de pH ácido; el riego debe ser moderado. Se la reproduce mediante semillas (para un mejor resultado es conveniente estratificarlas antes con frío húmedo), división de mata en el otoño o esquejes tiernos. Para que conserve su buen aspecto hay que quitarle las flores a medida que se van secando.

Su cultivo no presenta mayores problemas y es muy resistente a plagas y enfermedades.