El Ajo de oso, o Allium ursinum es una planta de consistencia herbácea, perenne, perteneciente a la familia Liliaceae, es originaria Asia y de la parte norte de Europa, crece espontáneamente dentro de la flora de soto bosque, desde el nivel del mar hasta los mil quinientos metros. Ronda apenas los treinta centímetros de alto. Prefiere suelos ligeramente acidificados con bastante humedad y ricos en nitrógeno. No soporta bien ni las temperaturas extremadamente altas ni las muy bajas, las heladas tardías le son también perjudiciales.
De su tallo subterráneo (bulbo) emergen las hojas basales que tienen forma elíptica, punta acuminada y son de color verde brillante. Entre ellas surge un pedúnculo floral triangular que sostiene en su ápice una inflorescencia (que mide entre tres y seis centímetros de diámetro) de tipo umbela, formada por entre seis y veinte pequeñas flores blancas de seis pétalos lanceolados, con seis estambres de anteras dorsifijas, un ovario superior con tres lóculos y un estilo que culmina en un estigma simple. El fruto es capsular y contiene una o dos semillas subglobosas en cada lóculo.
Sus hojas son comestibles (se hallaron vestigios prehistóricos de su consumo en asentamientos humanos del neolítico y del mesolítico), pueden comerse tanto crudas (ensaladas) como cocidas (salteadas en aceite o hervidas en sopas); también se usan como forraje para el ganado.
Los bulbos alargados y de aspecto escamoso, que miden dos centímetros por cuatro aproximadamente, son usados como condimento para distintas comidas. Aportan a nuestra dieta abundante vitamina C. Como por su apariencia es fácil confundir a esta planta con otras especies silvestres que pueden ser venenosas y no aptas para el hombre, se indica que la mejor manera de distinguirlas es frotando las hojas entre los dedos pues de inmediato se percibirá el característico olor a ajo que desprenden si es la planta correcta. En medicina no tradicional se lo emplea para regularizar la presión sanguínea y reducir los niveles de colesterol, también como antihelmíntico y diurético.