La Thysanocarpus radians, cuyo nombre en idioma inglés es “Fringepod”, es una singular planta dicotiledónea anual, de consistencia herbácea, que alcanza entre veinte y sesenta centímetros de alto por unos treinta de ancho, perteneciente a la familia Brassicaceae (la misma de la Mostaza) y originaria de América del Norte.

Sus efímeras hojas basales tienen forma oval-lanceolada, miden de dos a cinco centímetros y poseen bordes sinuosos y dentados; las superiores son simples, lanceoladas, más anchas en la parte inferior y se abrazan a los rectos tallos.

Florece a comienzos de la primavera en los valles o bajo la sombra de los altos robledales. Sus pequeñas flores bisexuales, blancas o de color púrpura, con cuatro sépalos libres ascendentes de forma oval a oblonga, cuatro pétalos de espatulados a oblongos y seis estambres con filamentos algo dilatados en la base y anteras ovales amarillas, aparecen reunidas en una larga inflorescencia racimosa abierta.

Los frutos son cápsulas, o silícuas, indehiscentes, planas y circulares, de uno a dos centímetros de diámetro, sostenidas por largos y delgados pedicelos; el ala membranosa radiada que los rodea es la que le da su nombre a la planta y lo que la distingue de otras de su misma especie; contienen una sola semilla, lisa, comestible y con raíz embrional en el borde donde se unen los cotiledones. Permanece adherido a ellos el cáliz que es persistente.

Si deseamos cultivarla en nuestros jardines hay que recordar que le gustan las ubicaciones a pleno sol  y que el riego debe ser regular, no resiste los encharcamientos del terreno. Es ideal para rocallas.