El Azahar del monte, o Quilineja, que responde al nombre científico de Luzuriaga radicans, es una planta trepadora perenne que pertenece a la familia Luzuriagaceae (Philesiaceae según otra clasificación y Alstroemeriaceae en una tercera ), originaria del sur de Sudamérica, donde la podemos hallar entre el nivel de la costa y los dos mil metros de altitud. La palabra “radicans” dentro de su nomenclatura científica hace referencia a que justamente es con sus finas raíces aéreas que se sujeta para trepar por los árboles que le sirven de soporte. Mayormente se la utiliza como especie ornamental, pero con sus largos tallos se confeccionan también variadas artesanías.

En su hábitat las precipitaciones son abundantes y crece bordeando cursos de agua, lagos y otros depósitos de agua de mayor o menor envergadura. Puede soportar épocas de sequía mientras que estas no sean muy prolongadas. Le agrada la sombra de las cañadas y la de los bosques tupidos. No soporta la nieve pero sí resiste heladas leves. Por lo particulares que son las condiciones climáticas donde prolifera es que cuesta mucho su cultivo.

Tiene hojas gruesas, de márgenes enteros y forma lanceolada, con nervaduras claras muy marcadas por el revés; se ubican de manera alterna en las ramas. Sus bellas flores blancas son hermafroditas; suelen aparecer solitarias,  de a pares o en grupos de cuatro. Los frutos son bayas globosas de piel lisa y verde que va cambiando a roja a medida que madura, miden de uno a un centímetro y medio de diámetro; contienen alrededor de una docena de semillas planas de menos de medio centímetro de longitud. Prefiere los suelos ácidos con agregado de materia orgánica y germina a temperaturas de entre 14 y 18 grados centígrados.