El Abeto de Guatemala

El Abeto de Guatemala, o Pinabete, denominado científicamente Abies guatemalensis, es un árbol de alto porte que forma parte de la familia Pinaceae. Es originario de América Central, donde se lo encuentra en México, Honduras, El Salvador y Guatemala principalmente, en altitudes que oscilan entre los mil ochocientos y los cuatro mil metros sobre el nivel del mar, casi siempre en suelos volcánicos con buen drenaje e importante cantidad de materia orgánica.

Es muy resistente al frío, hay zonas en las que soporta heladas gran parte del año. Su tronco es cónico y sus ramas crecen horizontalmente, la corteza es oscura y está dividida en placas. Las hojas o agujas desiguales se disponen a cada lado del raquis central a modo de peine, son de un tono verde oscuro en la parte superior mientras que la inferior es casi blanca.

Los conos, que miden de ocho a once centímetros, se cosechan una semana antes de que se abran porque una vez ocurrido esto comienzan a desintegrarse, el momento justo es cuando cambian de color y exudan resina. Se precisan de veinte a treinta kilos de conos para obtener un kilo de semillas (oscuras, aladas y con un largo de 10 a 15 milímetros); a las mismas les cuesta bastante germinar por lo cual hay que someterlas a algún proceso de escarificación antes de sembrarlas; luego su crecimiento es lento y le demanda al Pinabete un par de años el alcanzar el tamaño indicado para ser trasplantado.

Su madera es muy dúctil para trabajar y se la emplea para confeccionar artesanías y útiles para el hogar; también brinda leña y carbón, de modo que se lo ha talado sin consideración y hoy es especie protegida por hallarse en peligro de desaparecer, volcándose en muchas regiones a su cultivo. Esta especie es de mucho valor puesto que controla el flujo de las aguas impidiendo la erosión de los terrenos y bajo su sombra crecen hongos comestibles, incluidas las micorrizas que vienen asociadas con ella.

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