El Camboatá, o Cambuatá, cuyo nombre científico es Cupania vernalis, es un árbol dicotiledóneo y perennifolio que pertenece  la familia Sapindaceae, originario del sur del continente americano; mide entre siete y diez metros de alto y su tronco ronda los ochenta centímetros de diámetro; la copa es alargada. Posee un afina corteza exterior de color pardo, aspecto rugoso y con muchas cicatrices; su raíz es pivotante.

Sus hojas son compuestas, pinnadas, con alrededor de veinte folíolos lanceolados de un verde muy oscuro, bordes serrados, glabros en la superficie externa y con nervaduras pubescentes muy marcadas en su cara posterior. La floración comienza en el verano y se prolonga durante parte del otoño; da pequeñas flores blancas que se reúnen en racimos o panículas que miden entre diez y veinte centímetros de largo; es una especie melífera por lo que es ideal tenerlo si se poseen colmenas.

El fruto, que es capsular y dehiscente, contiene ente una y tres semillas oscuras y brillantes, de forma ovoide, rodeadas por un arilo amarillo o naranja; atrae mucho a distintas especies de aves.

Dentro de la medicina no tradicional se le atribuyen propiedades digestivas, febrífugas, anti reumáticas y anti inflamatorias; el té de hojas se indica en casos de hipertensión mientras que con la cáscara de los frutos se preparan tisanas que alivian las molestias asmáticas y bronquiales en general. Su corteza es rica en tanino y su madera rojiza es muy utilizada en labores de carpintería, también se la emplea para producir carbón de leña.