El Garbancillo de Tallante, que recibe el nombre científico de Astragalus nitidiflorus, es una planta herbácea perenne  endémica del sureste de España y forma parte de la familia Fabaceae. Fue hallada a comienzos del siglo XX pero poco tiempo después se la declaró extinta; cien años más tarde aparece un grupo de casi cincuenta individuos en los alrededores de la localidad de Tallante, al oeste de Cartagena. A partir de allí se tomaron los recaudos necesarios para conservar la especie y al día de hoy se encuentran bajo la jurisdicción del Parque Natural de la Sierra de la Muela, Cabo Tiñoso y Roldán.

Ramifica desde la base, las ramas son pubescentes, rectas y fuertes de entre dos y medio y tres centímetros de diámetro, que pueden alcanzar hasta cuarenta centímetros de altura. Sus hojas compuestas y pecioladas (presentan estípulas de medio centímetro de longitud en la base), miden unos ocho centímetros de largo, están formadas por entre seis y nueve pares de folíolos elípticos, de color verde, cubiertos por una densa pubescencia, más uno terminal con las mismas características.

Las flores se reúnen en racimos (formados por unos veinte ejemplares) sostenidos por largos pedúnculos ( de alrededor de seis centímetros de largo) rectos. Cada una está protegida por brácteas lanceoladas; el cáliz, con forma acampanada y borde dentado, es pubescente y la corola es de color amarillo claro o crema, con el estandarte el doble de largo que los otros pétalos; el androceo cuenta con diez estambres. Los pequeños frutos son ligeramente oblongos y contienen varias semillas oscuras.

Como todas las plantas de la familia Fabaceae es de sencillo germinar, pero han sido las condiciones adversas del entorno las que la han colocado en peligro de extinción, por ello es que cuando hallamos bellos ejemplares silvestres de cualquier especie debemos tener cuidado de no dañarlos ni de quitarles sus flores pues luego no han de devenir en fruto.