El Berro amarillo, o Mímulo, es una planta herbácea perenne de porte erecto que recibe la denominación científica de Mimulus luteus y forma parte de la familia Scrophulariaceae. Mide alrededor de treinta centímetros de alto por otro tanto de ancho y es originaria de América del Sur donde la encontramos en estado silvestre entre los quinientos y los tres mil metros de altitud.
Se la emplea como ornamental en los jardines por la belleza de sus flores amarillas atrompetadas de cinco pétalos, ocasionalmente moteados de rojo; posee varios estambres con anteras rebosantes de polen dorado Es una especie muy resistente a plagas y enfermedades, puede soportar temperaturas muy bajas e incluso sobrevivir bajo la nieve y es de fácil cultivo, aunque no le agrada el viento. Prefiere ubicaciones a pleno sol aunque tolera algo de sombra; se adapta a diferentes tipos de suelo siempre que tengan buen drenaje, el riego debe ser moderado, tratando de mantener húmedo el sustrato.
Sus hojas son ovales, pequeñas, sésiles, simples, verdes y con bordes irregularmente dentados; se disponen de manera opuesta en los tallos (que son glabros en su parte inferior y pubescentes en la superior). Para que se mantenga con buen aspecto conviene suministrarle al menos una vez al mes algún fertilizante mineral añadido al agua de riego.
El fruto es una cápsula ovoide (con cinco costillas sobresalientes) de consistencia papirácea. Se la propaga mediante semillas, a cubierto, hacia fines de invierno, para poder llevar las plántulas nuevas a su sitio definitivo cuando comienza la primavera, ya que la germinación les demanda entre una y dos semanas.