Se conoce comúnmente como Bluet y científicamente como Houstonia caerulea, o Hedyotis caerulea, a una planta perennifolia de consistencia herbácea, miembro de la familia Rubiaceae, originaria de Canadá y Estados Unidos donde crece formando matas entre los altos pastos de las extensas praderas. Mide unos diez centímetros de alto, pudiendo llegar con los tallos florales a los veinte.
Sus hojas, simples y pseudopecioladas, son verdes, ovales, con el margen entero y tienen entre dos y tres centímetros de largo, disminuyendo su tamaño a medida que se acercan al ápice del tallo; se disponen de manera opuesta en él y arrosetadas en la base, donde su forma cambia a espatulada y poseen mayor longitud.
Por sus hermosas flores terminales, hermafroditas y solitarias, es utilizada ornamentalmente en los jardines. Las flores de cuatro pétalos (ovales y acuminados) son pequeñas y de un color celeste muy claro o también blanco, con el centro amarillo; el cáliz es tubular y el ovario ínfero. Hay variedades como la Houstonia pusilla, de más bajo porte aún, que da flores violáceas y la Houstonia purpurea, bastante más alta, que las da rosadas. Los frutos son bayas esféricas de menos de un centímetro de diámetro.
Podemos propagarla mediante semillas, sembrándolas apenas recolectadas casi a ras del sustrato, o por división de mata. Generalmente se comporta como bianual, creciendo durante su primer año y floreciendo recién al segundo. Le agradan las ubicaciones con sombra parcial y los suelos ricos en humus, con buen drenaje y pH de neutro a ácido. Las raíces de la rubiáceas se han empleado desde la más remota antigüedad para extraer alizarina y purpurina, dos tintes rojos utilizados para el teñido de ropa.